Un joven llamado José caminaba por el mundo, mostrando su puntualidad
y con ello su responsabilidad.
Era conocido como un niño muy puntual, pues siempre llegaba a la hora exacta a sus compromisos. Era un niño muy
organizado.
Una mañana al mirar su reloj pensó
que tenía tiempo de sobra para
acudir a un lugar a la hora convenida, por lo que se alistó con mucha
paciencia.
Fue entonces que al mirar su reloj
se dio cuenta que este se encontraba malogrado, muy desesperado salió de su
casa para ir a su compromiso, llegando tarde.
Finalmente, José despierta angustiado y se da cuenta que todo fue un sueño, una pesadilla,
a él no le gustaba llegar tarde a ningún lugar. Desde entonces, decidió revisar su
reloj todas las noches.
Esto le permitió no
desesperarse en la vida, seguir llegando
responsablemente a sus actividades.
Autor: Jhon Quilluya P
Grado: 3 A
esta interesante
ResponderEliminarSi
Eliminarmmm...
ResponderEliminarlindo tu cuento Yhon en este cuento aprendi que hay que ser precabidos y no confiarse de las cosas
Si hay que ser precavidos con las cosas y aprendí a no confiarse
Eliminar:poop:
ResponderEliminarMuy interesante
ResponderEliminarPero muchas veces uno peca de exagerado y eso no esta bien
ResponderEliminarEsto nos quiere decir q ay ser precabidos con todas las cosas y no confiarse de nada
ResponderEliminara
ResponderEliminarMuy interesante.Gracias
ResponderEliminarMuy interesante.Gracias
ResponderEliminarEste cuento es muy bueno además de ser corto habla sobre lo que nos puede llegar a pasar si no somos puntuales
ResponderEliminarel cuento esta muy chido y todo pero ya me voy por que si m¿no mi mamá me a asotar la cara con elbfhsdvkdj<bnvojsadm xcdn<iob {qF
ResponderEliminarJajajajajajja te mamastes
Eliminarmuy bien
ResponderEliminar